Si a fines de 2014 causó sorpresa la presentación de 17 ofertas en la licitación para clientes regulados del SIC -tras años en los que, con suerte, había uno o dos interesados-, el segundo proceso de este año, que incluye también a clientes del SING marcó un récord con 38 propuestas para suministrar energía entre 2017 y 2036.
A diferencia de años anteriores, el salón de recepción de oferta se vio atochado por participantes que quisieron ofertar por parte de los 1.200 GWh anuales por 20 años que ofrecían las distribuidoras. El punto de oferta fue el nudo Polpaico 220 kV y se dividía en tres bloques horarios y 50 subbloques.
Dentro de los participantes destacan históricos como Endesa Chile y Colbún, pero también participantes de la licitación recién pasada como Aes Gener ,con Guacolda Energía S.A.; Norvind S.A y Abengoa, además de nuevos actores como Aela Generación; Besalco Energía Renovables y Emelsa Energía.
El concurso tiene un cariz especial, puesto que es la última vez que las empresas estarán a cargo del proceso. A partir de 2016 será la Comisión Nacional de Energía (CNE) la que tomará las riendas debido a la nueva normativa.
Desde el Gobierno aseguraron que los resultados muestran una “clara” confianza por invertir en el país y un cambio de paradigma. En este sentido, el ministro de Energía, Máximo Pacheco, proyecta que en las ofertas económicas -que se abrirán el próximo 23 de octubre- los precios se ubicarán bajo los US$107,6 promediados en 2014.
“Estoy muy confiado en que los precios que vamos a ver en esta licitación son menores a los que vimos en la licitación del año pasado, porque cuando hay competencia, hay mejores precios”, dijo.
Por su lado, el secretario ejecutivo de la CNE, Andrés Romero, destacó los resultados por ser un “proceso complejo”, al no entregar tiempo suficiente para que las generadoras desarrollen proyectos nuevos.
“Como el comienzo de las inyecciones es en 2017, en esta licitación no estábamos esperando tanto oferente nuevo, sino que oferente con proyectos ya andando o maduros (…) Para el próximo proceso, el de largo plazo, esperamos que haya ofertas de nuevos entrantes ya que da cinco años para comenzar las inyecciones”, sostuvo.
Durante esta licitación, la CNE presentó un precio de reserva -precio máximo al cual podrán ser adjudicadas las ofertas económicas- de US$108,130 por MWh, con un margen de 4%. Sin embargo, según indicó Romero, esta no debe ser una referencia.
“Los márgenes de reservas se fijan de acuerdo a las condiciones propias del llamado. Indudablemente un llamado que está pidiendo energía para el corto plazo es distinto que uno que está pidiendo energía para el largo plazo. Ninguno de los actores debería ver en los precios de reservas que mostramos en esta licitación una marca respecto al precio de reserva de la próxima licitación, son completamente distintos”, explicó.
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